Ni hablar de todo en LinkedIn ni quedarse mudo. En el término medio se encuentra la virtud. Soy Jorge Suárez, y hablo sobre LinkedIn, emprendimiento, economía circular o medio ambiente en esta red. Me pueden interesar más temas pero me los guardo. Y vosotr@s, ¿de qué habláis en LinkedIn?
Lanzarse a comentar, a publicar, a compartir contenido en LinkedIn está al alcance de todos los usuarios de esta red. Sin embargo, no todo el mundo lo hace o en ocasiones, se hace sin un criterio o estrategia establecida.
Definir temas para comentar
Una red profesional como LinkedIn está llena de gente que aporta cuestiones, debates interesantes y de temáticas de lo más variadas. Por este motivo, cada uno de nosotros basándonos en nuestra experiencia o nuestros sectores profesionales que más nos gusten podemos ir aportando contenido. Y cuando hablo de «aportar» podemos empezar leyendo lo que ya se publica (si no estamos muy prácticos o estamos tímidos a la hora de lanzarnos a publicar). Para ello LinkedIn recientemente nos ha aportado la opción de buscar por contenido como podemos ver.
Lanzarnos a publicar
Si ya hemos hecho el ejercicio de buscar esas temáticas que como profesionales nos interesan podemos dar el siguiente paso: lanzarnos a publicar noticias o contenido al respecto.
La operativa es sencilla. Nos vamos a nuestro time-line (o muro, si queremos llamarlo así) e iniciamos publicación.
Lo ideal es dotar a la noticia compartida de nuestro toque personal, soltarse a comentar, dar una introducción. Siempre quedará mucho más creíble que compartir el link solamente (todavía se ven casos así).
Intentemos viralizar
Para esta fase (que depende de muchos factores) podemos usar cuestiones como las menciones y los hastags.
Menciones: dependiendo de cómo enfoquemos el contenido o noticia compartida o publicada tal vez merezca la pena mencionar o uno o varios profesionales implicados o en relación al tema. Simplemente escribimos @NOMBRE Y APELLIDOS (Ojo: habrá veces que ese profesional no podamos cargarlo, no desesperemos)
Hastags: tenemos la opción de incluir hastags interesantes y asociados a la temática del contenido. Para hacernos una idea de hastags interesantes y cuánta gente los sigue podemos ver sugerencias que nos indica LinkedIn.
Y lo podemos compartir en más lugares
Entre nuestros contactos será lo primero al darle a publicar. Pero si usamos la flechita de compartir (sí, nosotros mismos compartimos nuestro contenido) podemos derivarlo a grupos interesantes donde proceda dicho contenido. Parece obvio pero mucha gente comparte indiscriminadamente con el consiguiente riesgo de spam.
Y variar el contenido a publicar
Fotos, debates, vídeos… Hay mundo más allá de links de noticias. No hace falta ver más que el panel que tenemos al lado de colgar una nueva publicación. La podemos aderezar con documentos compartidos, fotos, vídeos o incluso dar reconocimientos a otros profesionales
Toda esa variedad para ir creando contenido, variado y con criterio en LinkedIn.
No pasarse de contenido ni de temática
¿Un experto en biomasa hablando de marketing? ¿Una experta en Big Data comentando un debate de técnicas de selección de personal? Es posible encontrar estas situaciones, pero, ¿no distraeremos o liaremos a nuestra audiencia?
Y es que aunque ya dominemos cómo publicar, compartir e interaccionar es recomendable saber en qué «charcos» profesionales nos metemos. Está claro que nuestro público nos identificará con unos temas concretos y determinados sectores.
Bien, con este pequeño post introductorio tal vez ya podamos ir levantando la mano en LinkedIn. Una buena estrategia de publicación te puede ayudar profesionalmente. Y tú, ¿tienes algo que decir en esta red?