En un verano tan raro como este conceptos como distancia de seguridad han venido para quedarse entre nosotros. Mantener una distancia adecuada puede hacernos caminar seguros. Y es que estar seguros es siempre una garantía seguir caminando. Y también para crecer profesionalmente en un lugar como LinkedIn. Con virus y sin él…
Y una buena forma de saber si nuestro camino va en la buena dirección en esta red lo tenemos analizando la información que LinkedIn nos brinda y que nos puede orientar en nuestra gestión e, incluso, en la definición de la estrategia correcta.
Número de contactos
Sin duda, un dato que salta a la vista. Cuanto de grande tenemos una red de contactos. Pero, ¿es realmente una métrica válida? Si como métrica consideramos algo que sirve para medir (en este caso, si vamos creciendo en LinkedIn) pues efectivamente es una métrica.
Ahora bien, si tenemos en cuenta que por mayor número de invitaciones que enviemos más probabilidad habrá de que crezca nuestra red no deberíamos considerarla tanto así. Y es que si nuestro objetivo es llegar a 5.000 contactos en un año podemos conseguirlo en pocas semanas o echar todo el año. Dependerá únicamente de la frecuencia y cantidad de invitaciones que lancemos, no exactamente de la repercusión de lo que hagamos.
Matización: no es lo mismo los contactos que vemos en la parte superior de la figura siguiente (esos son REALMENTE mis contactos en LinkedIn) que los contactos de la parte inferior (son más numerosos porque aquí se coge también a usuarios que teníamos en la libreta de direcciones del mail asociado a la cuenta en LinkedIn y que tienen perfil en esta red).
Visualizaciones de nuestras publicaciones
Cuanto se mueven, se visualizan nuestras publicaciones es un dato relevante por varios motivos. Primero, para saber si efectivamente nuestras publicaciones están despertando interés entre un público profesional. Y segundo, para comprobar cuáles son los formatos que más están calando entre la audiencia a la que te diriges. Con esos datos en la mano podemos ir estableciendo la frecuencia de nuestras publicaciones y los formatos que más interesan (sólo texto, texto con algún link, texto más vídeo, foto o presentación adjunta, etc…)
Matización: es cierto que si queremos sacar el bisturí y analizar más concienzudamente las estadísticas de nuestras visualizaciones de publicaciones nos quedamos con las ganas. Por ejemplo, no sabemos el porcentaje de clics que se han producido entre el nº de visualizaciones, cosa que sí podemos saber en las métricas de publicaciones desde una página de empresa.
Apariciones en búsquedas
Realmente es un dato que es una métrica ya que nos calcula las veces que hemos aparecido en búsquedas en LinkedIn según criterios que otros usuarios hayan puesto a la hora de lanzar las mismas. Pero, ¿realmente es un dato interesante aparecer en muchas búsquedas? Pues siendo prácticos la verdad que no nos lleva a muchos puertos de interés esta travesía. Y la cuestión es que aunque aparezcamos en muchas búsquedas, la eficacia de dichas apariciones puede verse muy diluida. ¿El motivo? Pues se supone que debemos atraer a la gente a nuestro perfil, a que lo visite. Es posible que a través de una búsqueda la gente llegue a localizar nuestro perfil e, incluso, entre en el mismo. Pero también es posible (y de hecho mucho más probable) que la mayoría de las veces quedemos perdidos entre la inmensidad de las búsquedas.
Matización: y es que tampoco llegaremos a saber, por ejemplo, qué gente nos ha buscado. Lo más datos genéricos como estos que vemos…
Visualizaciones de perfil
Sin duda, a nivel particular una de las métricas que más fácilmente podemos controlar y que más información nos da. La podemos controlar semanalmente y nos da resultados ciertos y además nos muestra la información de la gente que ha visitado nuestro perfil ciertamente. Ya no es la primera vez que os comentamos la importancia de saber qué profesionales nos han visitado. ¿Y si nos preguntamos a qué se debe tal visita?
Matización: dos números a tener en cuenta: 5 y 90. El primero se refiere a la cantidad de usuarios que podemos ver que han visitado nuestro perfil en una cuenta básica. El segundo son el número de días hasta donde se retraerán los datos de número de gente que nos haya visitado.
Tasa de interacción
Esta métrica solo la podremos usar en caso de ser administradores de páginas de empresa. Desde nuestras publicaciones desde perfiles personales nos podemos hacer una idea de cómo se ha interaccionado con las mismas sabiendo los datos de recomendaciones, comentarios y gente que la ha compartido. Pero no nos muestra los datos de los clics en las mismas (dar al play al vídeo adjunto o pinchar en “Ver más”, por ejemplo). Pues eso queda solventado en las publicaciones hechas desde una página de empresa con el parámetro de “Tasa de interacción” como podéis ver a continuación:
Matización: hemos de tener en cuenta que para el algoritmo de LinkedIn todas las interacciones en nuestras publicaciones suman, pero no lo mismo. Digamos que el valor más simple, que menos aporta son las recomendaciones y la que más aporta es la función de compartir una publicación.
Caminar seguro es posible, al menos, en LinkedIn. Eso sí, hay que seguir las indicaciones y tomar las medidas adecuadas este verano. Métricas para no recalentarse este verano y ventilar nuestra gestión en esta red. En la piscina, en el camping, en la playa a disfrutar del verano y…¡a medir se ha dicho!
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